 |
|
|
 |
|
 |
|
Deuda con hospitales públicos
de
Antioquia en la barrera del billón
de pesos
Juan
Carlos Arboleda Z. Periodista -
elpulso@sanvicentefundacion.com |
La crisis financiera que vienen
atravesando los hospitales públicos del país es
una realidad que se ha denunciado desde hace mucho tiempo sin
que las autoridades competentes tomen las medidas suficientes.
En el departamento de Antioquia, la deuda ha tocado la barrera
del billón de pesos. |
 |
De la deuda a 31
de diciembre, 351 mil millones correspondía a cartera
de más de 360 días, lo que equivale a clasificarla
como de difícil recaudo. 480 mil millones provenían
del régimen subsidiado con un incremento en un año
del 24%, mientras el régimen contributivo aportaba 225
mil millones con un crecimiento del 21% de su cartera en el
mismo periodo. En cuanto a la población pobre no asegurada,
así como de atenciones No POS con cargo a este mismo
grupo poblacional, el aumento porcentual fue del 46%, el mayor
de todos, al llegar en pesos a una deuda de más de 62
mil millones, cuando en 2015 era de 42 mil, lo que refleja entre
otras cosas, la decisión de la Gobernación de
Antioquia de cuestionar la responsabilidad del ente territorial
frente a esta facturación luego de los anuncios del ministro
Alejandro Gaviria en el mes de febrero de este año sobre
la desaparición del POS, lo que fue interpretado por
el gobernador Luis Pérez Gutiérrez como una automática
desaparición de lo No POS y por ende dejar en entredicho
la responsabilidad sobre su pago.
Entidades como el Fosyga también aportan al deterioro
de las instituciones de salud en rubros como el SOAT/ECAT, que
en 2016 llegó en Antioquia, y solo con la red pública,
a los $63.460 millones, incrementándose en 17%. En los
últimos años, el aumento de la cartera ha sido
constante, y más allá de mostrar una tendencia,
debería conducir a reflexiones de fondo, como saber si
lo que está fallando es el modelo del aseguramiento,
o si estamos en presencia, como se ha denunciado en varios escenarios,
de una estrategia sistemática de no pago, lo cual puede
ser peor por cuanto conlleva un dolo en contra del estado. |
 |
Efectos
de la deuda
Además de lo preocupante que resulta que a un
grupo de hospitales de carácter público se le
adeude casi un billón de pesos, las consecuencias de
la actual situación se reflejan en primera instancia
en los pasivos; es decir las deudas contraídas por las
instituciones públicas de salud y que en Antioquia llegan
a los 583 mil millones de pesos, de los cuales 200 mil millones
son deudas con las plantas de empleados y trabajadores mientras
383 mil millones corresponden a cuentas no pagadas a los proveedores.
Esto mostraría que el funcionamiento de los hospitales
públicos se está apalancando en el recurso humano
y en los proveedores de medicamentos e insumos hospitalarios.
Para Luis Alberto Martínez, director ejecutivo de la
Asociación de Empresas Sociales del Estado de Antioquia,
AESA, la profundización de la crisis financiera dificulta
que las ESE´s puedan cumplir los planes de saneamiento
fiscal y financiero acordados con los ministerios de Hacienda,
de Salud y Protección Social lo que puede conducir en
el panorama actual a que se presenten incumplimientos e incluso
se incremente la cantidad de instituciones en las categorías
de riesgo medio y alto.
Proyecciones realizadas por AESA sobre la próxima categorización,
muestran que en Antioquia se puede pasar fácilmente de
las 40 instituciones que hoy presentan un riesgo fiscal y financiero
medio y alto, a 62; lo que representaría un incremento
del 50%. Todo esto en un periodo de un año.
El doctor Martínez señala un nuevo fenómeno
que contribuye a la explicación multicausal del aumento
de la cartera. Para él, las EPS vendrían colocando
mayores barreras de acceso a la facturación generada
por los prestadores al crear aplicativos que funcionan a manera
de plataformas donde se debe cargar por parte de los hospitales
la facturación, ejercicio que no se ha podido efectuar
de manera eficaz debido a que la mayoría de veces se
presentan problemas de implementación en las aplicaciones,
lo que termina produciendo que las aseguradoras desconozcan
las deudas no cargadas.
Servicios prestados pero no pagados
Algunas cifras relacionadas con la prestación
de servicios por parte de los hospitales públicos de
Antioquia muestran ejecutorias poco reconocidas.
Por ejemplo el número de camas de hospitalización
aumentó de 3.087 en 2012 a 3553 en 2015; el total de
egresos pasó de 188.561 en 2012 a 190.514 en 2016; las
consultas efectivas en el mismo periodo también aumentaron
de 3´566.996 a 3´967.245, lo que significa más
de 400 mil consultas.
A su vez las consultas de medicina especializada urgentes realizadas
entre 2012 y 2016 pasaron de 67.700 a unas 109.884. Algo similar
se observa en las cirugías realizadas (sin incluir partos
y cesáreas) que subieron desde 103.307 hasta las 124.392.
De lo anterior se desprende que la red pública hospitalaria
continua siendo un soporte importante para el funcionamiento
del sistema y que en algunas áreas su papel cobra más
preponderancia cada día.
Finalmente el doctor Martínez señaló que
la importancia de salvar a los hospitales públicos estriba
en que estos brindan la posibilidad de recuperar desde el mismo
estado la sostenibilidad financiera del sistema de salud, ya
que el fortalecimiento de la red pública hospitalaria
permitiría mejorar el cuidado de los colombianos con
equilibrio financiero.
Para el doctor Martínez, la realidad es que el panorama
aumenta el riesgo de liquidación de hospitales públicos,
lo que va en plena contravía de la Ley Estatutaria en
salud y de múltiples fallos de la Corte Constitucional
que señalan que la rentabilidad de las Empresas Sociales
del Estado no puede ser medida por factores meramente financieros,
sino que se deben considerar las rentabilidades sociales. Así
las cosas, lo que está en juego no es una sostenibilidad
calculada en pesos, sino en vidas y niveles de bienestar de
la población. |
|
 |

|
|

|