MEDELLÍN,   COLOMBIA,   SURAMÉRICA    AÑO 16    No. 221  FEBRERO DEL AÑO 2017    ISSN 0124-4388      elpulso@elhospital.org.co






 

 

 
Aunque el Gobierno ha desestimado la necesidad de una reforma integral al sistema de salud, los gremios hacen propuestas para mejorarlo o crear uno nuevo que facilite el acceso y la calidad en la prestación de los servicios.
En el documento técnico elaborado por el Ministerio de Hacienda y Crédito Público, “Hacia una nueva economía”, se proyectan las finanzas públicas del año 2015 al 2027. En el marco de la regla fiscal para esta década siguiente y como respuesta al contexto local e internacional, se destaca una caída de los precios internacionales del petróleo que ha significado una reducción de 3.3 puntos porcentuales del PIB, además de una devaluación del peso frente al dólar y la aceleración de la inflación que ha conllevado el pago de interés de la deuda en 0.9% del PIB; allí se concluye que el déficit fiscal en los últimos tres años ascendió a 4.3% del PIB.
No obstante, la obligación en términos del principio de progresividad es mantener una política de gasto público e inversión social, demanda de estrategias focalizadas para responder a las exigencias y demandas de la sociedad, especialmente en la provisión de los servicios públicos básicos, en donde la salud es determinante.
Conforme a lo anterior el Capítulo XI consigna el Financiamiento del Sistema General de Seguridad Social en Salud (SGSSS), del cual se extraen los elementos que explican el desempeño en materia económica y financiera de la salud en Colombia en el marco fiscal de mediano plazo entre el periodo 2015 - 2027.
Allí se destaca el impacto fiscal que tendrá la implementación y puesta en escena de la Ley Estatutaria en Salud LES, en cumplimiento de lo dispuesto en la Ley 1751 de 2015, lo cual supone a partir del año 2017 un aumento de $1,5 billones adicionales en cada vigencia y $700.000 millones de recobros dentro de las UPC de los regímenes contributivo y subsidiado, respectivamente. Lo mismo que las variaciones en términos de afiliaciones, incrementos en los ingresos bases de cotizaciones, traducidas en densidad familiar y salarial y en la recomposición de nuevas fuentes de financiamiento.
Son evidentes los logros en el Sistema General de Seguridad Social en Salud, especialmente en materia de acceso y contribución financiera, en términos de la universalización de la cobertura (96,7% al cierre de 2015), la unificación de los planes de beneficios, la actualización integral del POS, la portabilidad, movilidad, el control de precios de medicamentos, el flujo de los recursos, la mayor resolutividad en los servicios, procedimientos y medicamentos No POS.
Así mismo se percibe un avance en la unificación y mayores exigibilidades en criterios de habilitación financiera de las aseguradoras en salud y la obligación en razón de mejores condiciones de provisión y derecho del goce efectivo a la salud. Sin embargo el reto es lograr mayores eficiencias técnicas y financieras en el sistema, fortalecimiento de controles, nuevas fuentes de recursos para el financiamiento, calidad en la atención y oportunidad en la prestación de los servicios de salud.
Todo lo anterior, que garantice en el corto y mediano plazo la sostenibilidad financiera del sistema, sobre la base de la limitación de los recursos y la necesidades crecientes en servicios, donde se destaca un crecimiento expansivo del costo médico, pese a que los ingresos del Presupuesto General de la Nación destinados para la cofinanciación del Régimen Subsidiado se han incrementado un 225%, al pasar de $1.2 billones en 2010 a $4 billones en 2016, lo que equivale al 0.5% del PIB en este último año.
Destaca el estudio cómo para los próximos 10 años se pronostica que continúe un crecimiento del número de afiliados cotizantes a una mayor tasa que la del crecimiento del número de afiliados en el Régimen Subsidiado, al mismo tiempo que la proporción entre cotizantes y beneficiarios en el Régimen Contributivo fue de 1.2 en 2015, lo cual es un hecho positivo para el sistema pues en esa medida se mejoran los ingresos.
En este mismo sentido se presenta como un factor positivo una disminución en la densidad familiar, es decir que la población cotizante no tendría a cargo población beneficiaria y ello supone que para el año 2024 en número de afiliados en ambos regímenes será igual y que para el 2027 la proporción entre cotizantes y beneficiarios se ubicará alrededor del 1.6; de igual forma, se estima que la densidad salarial será creciente y representará 1.85 veces el SMLMV.
Como respuesta al contexto macroeconómico propuesto en este estudio, se espera que las afiliaciones en el régimen contributivo a partir del año 2019 sean crecientes, dada la dinámica económica propuesta y que sugiere una corrección en el déficit de caja del Régimen Subsidiado.
Además del comportamiento positivo de las variables descritas en el estudio del marco fiscal en salud, la UPC enseña un crecimiento real durante el periodo, en especial el aumento nominal para 2017 de 8.5% (fue definida en 8.20% para 2017) para un crecimiento real del 2.0% y a partir de allí y hasta 2027 un crecimiento constante o real del 1.2%.
Para las distintas modelaciones o recreación de escenarios se establece un valor de recobros de $2.3 billones en el Régimen Contributivo como valor a pesos constantes, en razón del comportamiento de las últimas vigencias para los recobros corrientes.
Entre el análisis de las fuentes en el financiamiento, se proyectó que para el año 2016 los recursos del régimen subsidiado alcanzarían los $15.3 billones, lo que equivale al 1.8% del PIB, cuando en 2015 se consolidó en $14.2 billones con igual peso relativo frente al PIB. Para el régimen contributivo la relación fue $20.1 billones en 2016 y de $18.7 en 2015, representando el 2.4% y 2.3% respectivamente; se destaca cómo los aportes del PGN a 2016 se incrementaron en 225% entre 2010 y 2016.
En el caso de la aplicación o uso de los recursos se destaca cómo en el régimen contributivo el concepto de Recobros de No POS pasó de $2.4 billones en el 2015, (representó el 0.3% del PIB) a $2.3 billones conservando el mismo peso relativo (0.3%) en 2016 y en el régimen subsidiado el reconocimiento de la UPC representó el 1.8% en 2015 y 1,9% en 2016 proyectado.
Definidas estas variables de análisis de sostenibilidad del SGSSS como escenario base, sin considerar el efecto de la puesta en vigencia de la Ley Estatutaria en Salud, se percibe hacia futuro cómo el aseguramiento tendrá un impacto fiscal que puede dividirse en dos horizontes, tal cual se evidencia en la gráfica siguiente.
Dos momentos distinguen el balance de unidad de caja por Régimen 2015-2017. En un primer momento, a corto plazo, enseña un balance con desempeño negativo hasta el año 2021 en respuesta al comportamiento del Régimen Contributivo, lo mismo que de un marcado déficit en el Régimen Subsidiado de Salud. El segundo momento de registra a partir del año 2022 donde se revierte el desempleo negativo y los resultados comienzan a ser positivos, con un balance de unidad de caja superavitario, dado el buen comportamiento en el Régimen Contributivo y correlativamente un mejor desempeño en el balance del Régimen Subsidiado.
Con la entrada en vigencia de la Ley 1751 de 2015, el impacto .fiscal en la sostenibilidad del sistema de salud será notorio a partir del año 2017, donde el balance fiscal del Régimen Subsidiado se verá ostensiblemente afectado, justamente por la inclusión del No POS en la UPC, dado que en este escenario se incluye desde el año 2017 la suma de $1.5 billones y $700 mil millones de recobros dentro de la UPC de ambos regímenes, considerando en todo caso las frecuencias de uso de dichos regímenes. Dicha inclusión de lo No POS, naturalmente causará un aumento dramático en el gasto y con ello la afectación del resultado del balance fiscal, tal cual se observa en el gráfico.
A partir del año 2019 se espera un repunte en términos de afiliación en el Régimen Contributivo y de su ingreso, lo que a su vez contribuirá para mejorar parcialmente el déficit resultante en el Régimen Subsidiado, tal como se verá reflejado paulatinamente en la tendencia positiva del balance de unidad de caja a partir de ese momento.
El siguiente gráfico muestra la relación existente entre el balance de la unidad de caja y el impacto fiscal año a año luego de la implementación de la Ley Estatutaria en Salud, una vez se consoliden y unifique el pool de riesgo reagrupamiento de personas para aportar recursos (prima) para la asunción de siniestro o contingencias entre los regímenes Contributivo y Subsidiado.
Concluye el estudio que para afrontar y hacer más eficiente el mayor gasto como consecuencia de la implementación de la LES, es necesario considerar al menos, la unificación del pool de riesgo de ambos regímenes y recalcular, en la estimación de la UPC, los ponderadores de ajuste por grupos etarios (edad y género), según esa nueva reestructuración poblacional. Estas nuevas medidas están focalizadas a mejorar la distribución de riesgo entre la población, independientemente de su nivel de ingreso, edad, género y su lugar de residencia.
Para la consolidación e integración de un régimen único de aseguramiento en salud es menester: “i) eliminar las reglas diferenciales de operación y administración en ambos regímenes; ii) implementar lo establecido en la Ley del Plan Nacional de Desarrollo en el sentido de unificar el manejo de los recursos del aseguramiento; iii) establecer las condiciones de regulación que propicien la articulación de los aseguradores, entidades territoriales e IPS en función de los usuarios, propendiendo por el mejoramiento de los resultados en salud, a través de la implementación de mecanismos de pago por resultados, en el marco del enfoque de gestión integral de riesgo y garantía de la calidad.
En regulación, se pretende mantener y fortalecer la política de medicamentos e implementar negociaciones centralizadas de sus precios, control en la puerta de entrada de nuevos medicamentos, dispositivos e insumos, lo mismo que la racionalización de gastos no necesarios relacionados con el uso irracional o excesivo de medicamentos, entre otros.
La implementación de la LES supone por su parte la necesidad de avanzar en dos grandes retos: en la perspectiva de una política pública que permita el verdadero acceso universal y efectivo de los servicios de salud, bajo criterios de un adecuado sistema de gestión de riesgos en salud sostenible: y, en perspectiva fiscal, demandará esfuerzos adicionales de entre 0.17 y 0.25% del PIB, en promedio durante la vigencia del marco fiscal de mediano plazo.
Los esfuerzos anotados anteriormente deberán estar acompañados de medidas y estrategias orientadas en las siguientes líneas de trabajo, de tal suerte que se mejore la eficiencia del sistema en la gestión de la provisión de los servicios de salud, así:
-Realizar una gestión del riesgo en salud por pool integrado y no disperso como opera en el pasado reciente, lo que sugiere ajuste en la UPC, dada la dinámica hoy del sector salud.
- Incorporar en el aseguramiento la financiación con recursos de la UPC gastos No POS, según la LES.
-Determinación metodológica de los precios de nuevas tecnologías, médicas con criterios de eficiencia y equidad.
-Auscultar nuevas fuentes de recursos para el sistema, lo mismo que flexibilizar algunas existentes a través de las instancias legales y reglamentarias.
-Mantener un control, seguimiento y monitoreo de programas y acciones que erradiquen y disminuyan la evasión y elusión de los aportes al sistema.
Es claro que las estrategias están diagnosticadas y se sabe con prioridad cuál es la ruta de trabajo para lograr la sostenibilidad del sistema de salud en Colombia, no obstante lo farragoso que resulta su materialización legal y reglamentaria y por tanto su instrumentación, por cuenta de la diversidad de intereses en el sector y a la complejidad en los instrumentos de control que no permiten la agilidad y pertinencia que el sistema demanda. Sin embargo, los dos vectores o perspectivas deben coincidir en el mejoramiento del estado de salud y calidad de vida de los colombianos, acorde con las capacidades económicas y financieras reales en el marco de las finanzas públicas, su regla fiscal y el derecho al goce efectivo de la salud.
Densidad salarial y familiar 2015 - 2027
Fuente: Cálculos propios MHCP - Viceministerio Técnico-DGPM-DGRESS
Balance de Unidad de Caja por Régimen 2015 - 2027
Fuente: Cálculos propios MHCP - Viceministerio Técnico-DGPM-DGRESS
Balance Régimen Contributivo y Subsidiado 2015-2027
Fuente: Cálculos propios MHCP - Viceministerio Técnico-DGPM-DGRESS
Impacto fiscal Ley Estatutaria en Salud 2015 - 2027
 
 
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