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El “quid” del asunto
En el anterior número de El Pulso presentamos los proyectos
de ley 019 del senador Luis Carlos Avellaneda, el 031 de la
senadora Dilian Francisca Toro, el 033 del senador Germán
Vargas y el 052 o propuesta gubernamental. Al cierre de esta
edición, otros seis proyectos avanzaban en su trámite
para modificar la Ley 100/93, todos con la firme intención
de mejorar las condiciones de salud y seguridad social de
millones de colombianos. Aparentemente, esta búsqueda
es la espina dorsal de los anteriores proyectos, pero también
del 038, 054, 057, 058, 098 y 105, nuevo abanico de propuestas
de reforma al modelo de salud, que ha generado todo tipo de
opiniones y reacciones entre los actores del sistema.
No es cuestión de “re-montar”
leyes
El Defensor Delegado para la Salud y la Seguridad Social,
Darío Mejía, señaló el pasado
17 de septiembre en foro de la Comisión Séptima
del Senado en Medellín, en el cual se reseñaron
algunos de los proyectos de ley, que es un verdadero artificio
que se presenten permanentes 'racimos' de proyectos para reformar
el SGSSS, cuando no se han comenzado a aplicar los principios
de la Ley 100 de 1993. Afirma el funcionario: “No es
're-montando' y re-calzando leyes como se van a cumplir los
objetivos de la ley; los buenos manejos semánticos
de la ley no garantizan el derecho a la salud; la falta de
dirección del sistema, la carencia de control y vigilancia
no han permitido hacer un justo seguimiento a la Ley 100,
y nunca supimos si fue o no una buena ley porque no se aplicó
realmente como debía ser. Se pueden hacer 'piezas para
ángeles', pero eso no va a llevar absolutamente a nada,
porque no hay voluntad, deseo, ni autoridad por parte de quienes
deben hacer funcionar el Sistema”.
Frente a la propuesta de convertir las Administradoras de
Régimen Subsidiado (ARS) en Empresas Promotoras de
Salud (EPS) que administren el Nuevo Régimen Subsidiado
(a su entender no muy ‘sesuda’ propuesta), señaló
que la Defensoría espera que los nuevos proyectos de
ley tengan mecanismos realmente exigentes que controlen el
ingreso al Sistema de entidades relacionadas con recursos
de paramilitarismo y narcotráfico, como sucedió
recientemente con algunas entidades que él denominó
“ARS con pasamontañas”.
“Disociación ideo-motora”
Por su parte, el presidente nacional del Sindicato de la Seguridad
Social, Sintraseguridad Social, Saúl Peña Sánchez,
anotó que en medio de este alud de proyectos de reforma
la pregunta pertinente es: ¿Para quienes se está
reformando, a favor de quién o de qué?
A la luz de este interrogante, Peña Sánchez
clasifica los proyectos en dos grupos: el primero agrupa aquellos
que consideran que las cosas no andan tan mal y sólo
es cuestión de introducir pequeñas modificaciones
a la Ley 100, caso concreto del 052 y el 054; y en el otro
grupo, estarían los que buscan el cambio en las estructuras,
a su juicio el 019 de senadores de la oposición y el
098 del Polo Democrático.
Puntualizó que el gran problema de los proyectos del
primer grupo es la “disociación ideo-motora”,
es decir pensar una cosa pero hacer otra. Explica: “Al
leer las exposiciones de motivos de los proyectos, todos dicen
cosas hermosísimas, reseñan muy bien los problemas,
y hasta ahí todos estamos de acuerdo, pero cuando uno
ve las terapias que proponen entonces son absolutamente lo
contrario”.
Señaló como terriblemente asustadora la propuesta
gubernamental, que en medio de la crisis hospitalaria nacional
sentencia a muerte a las instituciones públicas prestadoras
de servicios de salud que no demuestren sostenibilidad financiera
en el término de tres vigencias fiscales consecutivas,
y agregó que otra gran falencia del proyecto del gobierno,
es que se olvida de los hospitales universitarios y del Seguro
Social.
Propuso como medida de conciliación entre los proyectos,
hacer un acuerdo nacional que por encima de intereses sectoriales
o gremiales, siente las bases de un modelo de salud con fuerte
componente de salud pública y libere a la salud del
ánimo de lucro.
Cohan aboga por hospitales
Respecto de los hospitales públicos también
se pronunció Julián Vargas Jaramillo, presidente
de la Junta de la Cooperativa de Hospitales de Antioquia (Cohan),
quien anotó que en cualquiera que sea la forma que
se organice el sistema de salud, es necesario apuntarle a
dos objetivos fundamentales: proteger los intereses de los
hospitales y los intereses de los usuarios, directos beneficiarios
de los servicios de salud.
También hizo un llamado a los senadores ponentes del
proyecto de reforma a la Ley 454, que regula las formas empresariales
solidarias, a evitar que esta iniciativa termine con las cooperativas
de hospitales, pues el proyecto, entre otras cosas, extingue
las formas de asociaciones mutuales y las Administraciones
Públicas Cooperativas (APC), figura jurídica
bajo la cual está representada Cohan.
No debe ser simple aseguramiento
De otro lado, el fiscal de Asmedas Antioquia, Germán
Reyes, cuestionó severamente la idea del gobierno de
reformar pensando solo en el aseguramiento direccionado hacia
el sector privado, bien sea en el régimen contributivo
o en el subsidiado.
Explicó que no se observa la voluntad del gobierno
en solucionar temas graves como el de la red pública
hospitalaria: “El aseguramiento per se no garantiza accesibilidad
a los servicios de salud. Podemos tener en un momento determinado
toda la población asegurada, pero si no hay una red
pública de prestación de servicios de salud
adecuada, no vale la pena hacer el esfuerzo de tener asegurado
a todo el mundo”.
Nuevos proyectos de Ley
Los nuevos proyectos presentados ante el Senado son el 038
que adiciona el artículo 157 de la Ley 100/93, para
permitir el pago en el exterior de aportes en salud para la
vinculación y atención de nacionales al Plan
Obligatorio de Salud. El 054, de autoría de la senadora
Ángela Victoria Cogollos, propone algunos ajustes puntuales
a la Ley 100 para corregir el rumbo de algunas políticas.
El 057 que establece el Sistema General de Seguridad Social
en Salud y Pensión para los jueces de paz y los jueces
de reconsideración. El 058 que modifica el SGSSS y
adiciona normas especiales a favor de los pueblos indígenas,
radicado por el senador Jesús Enrique Piñacué.
El 105 que implementa el Sistema General de Seguridad Social
en Salud para los trabajadores del arte y gestores culturales.
Y el 098, que reforma los libros Segundo y Tercero de la Ley
100 de 1993 y crea el Sistema Integrado de Seguridad Social
en Salud, Sisesa.
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