MEDELLÍN,   COLOMBIA,   SURAMÉRICA    AÑO 16    No. 220  ENERO DEL AÑO 2017    ISSN 0124-4388      elpulso@elhospital.org.co






 

 


Florence Nightingale,
líder de la enfermería con amor

Hernando Guzmán Paniagua, Periodista - elpulso@sanvicentefundacion.com
En campos de batalla y hospitales, la inglesa Florence
Nightingale enseñó al mundo a ver a los heridos como seres
humanos y al enfermo por encima de la enfermedad.
'La Dama de la Lámpara', como se le conoció a Florence Nightingale, fue pionera de la atención humanizada en salud. Nació en Florencia, Italia, en 1820 y murió en 1910 en Londres, Inglaterra.
Nightingale atendió a heridos en camas sin sábanas, con mala comida, con uniformes "tiesos de la suciedad" y creó hospitales de guerra en la Guerra de Crimea, en la Franco-Rusa, en Alemania, Austria, Francia y Egipto. El tifus, el cólera y la disentería eran las tres primeras causas de muerte, las heridas de guerra, apenas la sexta.
Sus cálculos de la tasa de mortalidad demostraron que con mejores métodos de sanidad bajan las muertes; midió el promedio de velocidad de transporte de heridos en trineo y el tiempo para cubrir grandes distancias en Canadá. Para Alex Attewell, Florence “creía que las enfermeras, al encargarse de la higiene, tenían una oportunidad única para progresar espiritualmente, para descubrir la naturaleza de Dios mediante el aprendizaje de sus “leyes de la salud”.
Rescatar al ser humano
“Florence y otros pioneros rescataron la salud pública desde la promoción, la prevención y los determinantes sociales” declaró a El Pulso María Victoria Arteaga, docente de la Facultad de Enfermería de la Universidad de Antioquia. Destacó su sentido humano en el cuidado y acompañamiento de los soldados en la Guerra de Crimea. “En estadística dijo- creó el “gráfico polar”: cómo y por qué morían las personas, dio bases científicas a la enfermería e influyó para que Inglaterra cambiara las leyes de salubridad pública: desagües, ventilación de las habitaciones… Las enfermeras, en todos los espacios, debemos retomar su teoría y rescatar al ser humano; infortunadamente, hoy en los entes de salud el contacto con él es pasajero, por volumen de pacientes”.
Por su parte, Edith Arredondo, docente de Formación Profesional en la Facultad de Enfermería de la Universidad de Antioquia, valora la preocupación de Nightingale por los niños desamparados en guerras y caídos en desgracia “sobre todo hoy que vivimos algo similar, cuando llegan a las instituciones de salud personas con carencias sociales, económicas y familiares”, aseguró y dijo que “Su legado es que la salud pública, y en particular la enfermería, deben mejorar los servicios de salud. Es valioso su impulso a la formación de las enfermeras, -es llamada la madre de la enfermería- su apoyo a la investigación en salud, en epidemiología y a la atención humanizada”.
La docente abogó por los derechos del paciente: acompañamiento a él y su familia en hospitalización y reinserción, muerte con dignidad, promoción y prevención, banderas de Nightingale, quien tuvo en cuenta las crisis que generaron las guerras e intercedió ante los poderosos por el paciente y su familia. “La historia es cíclica, la problemática se repite, las enseñanzas de Florence son plenamente vigentes para nuestro posconflicto”, concluyó la profesional.
Hoy, casi dos siglos después de su nacimiento, las enfermeras siguen siendo “responsables del cuidado del paciente las 24 horas del día los 365 días del año”, como lo confirma Yurley Agudelo, Directora de Enfermería del Hospital Universitario San Vicente Fundación. Agudelo asegura que la enfermería actualmente ha demostrado ser una profesión “autónoma e independiente y aunque comparte conocimiento con otras disciplinas, tiene su propio cuerpo de conocimientos”, lo que, a diferencia del siglo XIX y XX, ha generado un respeto y una valoración cada vez mayor.
“La enfermería se ha ido posicionando y para que pueda sostenerse es necesario que desde las directivas de las organizaciones se le dé el empoderamiento y la autonomía necesaria para cumplir su función”, continúa Agudelo y afirma que la enfermera es un par profesional, desde otro conocimiento, de todas las disciplinas y no ejerce un papel de subordinación de ninguna otra.
El tiempo vivido por 'La dama de la lámpara' no es el mismo que el actual y es evidente el avance en aspectos humanitarios e higiénicos, sin embargo, para Agudelo, en centros hospitalarios de Centro y Suramérica aún hace falta posicionar el conocimiento de la enfermería en un nivel mucho más avanzado; “Eso se llama enfermería práctica avanzada, que a medida que se tenga el conocimiento y esa capacidad de pensamiento crítico para la toma de desiciones, el empoderamiento y el posicionamiento estratégico dentro de las instituciones, la enfermería cumple su objetivo”, concluye la Directora.
 
Otros artículos...
Reforma al Sisbén no afectará régimen subsidiado
Mipres, postergado otra vez y con dudas sobre su implementación
Logros San Vicente Fundación en 2016
Florence Nightingale, líder de la enfermería con amor
2016, un año insatisfactorio para los gremios
Comisión de Jubilados quiere ser veedora en nuevo modelo de salud para docentes
Medicina y espiritualidad: ¿Dolor en el alma? (parte II)
El Vigía: Atención centrada en el paciente: una realidad o una meta
El generoso legado del doctor Bernardo Ochoa
Comedal 54 años
 

 



Arriba

[ Editorial | Debate | Opinión | Monitoreo | Generales | Cultural | Breves ]

COPYRIGHT © 2001 Periódico El PULSO
Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin autorización escrita de su titular
. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved