 |
|
|
 |
|
|
El
Vigía
|
|
|
 |
|
|
 |
Esta podría ser la
frase del momento emulando aquella tomada del Hospital de
Salpetrière en París, Si no le temes a
Dios, témele a la sífilis, cuando esta
enfermedad era una de las plagas de la humanidad y para la
cual no había cura. Guardadas las proporciones, hoy
se está viviendo una situación que tiene visos
de una nueva plaga, como lo han sido la peste, la influenza,
el cólera o la viruela, en el pasado.
|
| Cuando se analiza una
enfermedad transmisible desde el punto de vista de salud pública,
siempre hay que pensar en tres aspectos: la magnitud, la severidad
y la vulnerabilidad, y con base en esto se prioriza como un
evento de interés epidemiológico que merece mayor
atención y recursos que otros. |
El virus se detectó por vez primera
en 1976 en dos brotes simultáneos en Sudán y
República Democrática del Congo. La aldea en
que se produjo el segundo de ellos está situada cerca
del río Ébola, que da nombre al virus.
|
En el caso de la enfermedad por el virus Ébola, la
magnitud está en relación con el aumento exagerado
de casos en África Occidental, pero a su vez está
circunscrito a dicha área, y no podemos hablar de una
magnitud continental o mundial; así que en sentido
estricto, la magnitud no sería un criterio para priorizarla
a nivel mundial. Por otro lado está la severidad, y
no hay duda de que una enfermedad que tiene una mortalidad
de hasta el 90% de los enfermos tiene un alto grado de severidad,
y esto sí que amerita generar las alertas que hoy ha
generado la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Y si hablamos de vulnerabilidad la situación es aún
más preocupante, ya que no se dispone de un medicamento
efectivo para su tratamiento ni una vacuna para su prevención.
|
| La transmisibilidad
persona a persona es otro aspecto a tener en cuenta a la hora
de priorizar un evento de interés en salud pública;
en el caso del virus Ébola su transmisión se realiza
a través del contacto estrecho con sangre u otros líquidos
o tejidos corporales de un paciente infectado, y es claro que
no se transmite por el aire, el agua o los alimentos. Esto hace
que el riesgo sea mucho menor que el de otros virus cuya transmisión
es por aerosoles o por contacto sexual. |
|
La alerta obedece a los
aspectos de
severidad y no vulnerabilidad, además de que los virus
presentan gran variabilidad cuando pasan de una especie
a otra o circulan en forma epidémica: no se puede
predecir qué pasará cuando cruce las fronteras
o más personas estén infectadas.
|
La pregunta obvia
es: ¿Y si no es tan grande el problema y si no es altamente
transmisible, a qué se debe la alerta mundial? La respuesta
es que la alerta obedece a los dos aspectos restantes, la severidad
y la no vulnerabilidad. Por otro lado los virus presentan una
gran variabilidad cuando pasan de una especie a otra o cuando
empiezan a circular en forma epidémica, y no se puede
predecir qué pasará cuando cruce las fronteras
o cuando más personas estén infectadas. Lo que
no se quiere, es que la situación se salga de control.
El riesgo es muy bajo, ¡pero es real!
soox@sanvicentefundacion.com |
| |
 |
|
Probabilidad de Ébola
en Colombia: una en un millón
|
Tras
el informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS)
sobre la Enfermedad del Virus del Ébola (EVE) en 3 países
de África occidental (Sierra Leona, Guinea y Liberia),
como una Emergencia en Salud Pública de Interés
Internacional (ESPII), el pasado 8 de agosto, el análisis
de riesgo del Comité Estratégico Intersectorial
de Salud organizado por el Ministerio de Salud concluyó
que Colombia está en riesgo bajo frente al contagio.
El viceministro de Salud Pública, Fernando Ruiz, indicó:
Colombia hace monitoreo y seguimiento del virus desde
2013 y sigue todos los protocolos internacionales en salud pública
establecidos para inspección, vigilancia y el control
del mismo. |
 |
| La
probabilidad de que se presente en el país es de uno
en un millón; además, porque en Colombia no se
encuentra el reservorio de murciélagos que lo transmite,
de la especie megachiroptera. Más se solicitó
a autoridades sanitarias de puertos, aeropuertos y puntos de
entrada al país, estar atentas a la vigilancia y control;
y el Ministerio realizó un Abecé de la enfermedad
con recomendaciones para viajeros entre países y así
disminuir el riesgo de transmisión. |
| |
 |
|
| |

|
|
|
|